Mostrando entradas con la etiqueta GLOBALIZACIÓN. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta GLOBALIZACIÓN. Mostrar todas las entradas

miércoles, 8 de junio de 2011

CARTA DEL JEFE INDIO AL JEFE BLANCO


Este video resumen, hace referencia a la carta que el jefe sioux Seathl le envió a Franklin Pierce, decimocuarto presidente de los Estados Unidos de Norteamérica, como respuesta a la oferta que éste le había hecho para comprar una gran extensión de tierras indias a cambio de crear una reserva para el pueblo sioux.
La carta, ofrece una amplia reflexión sobre la naturaleza y el Planeta Tierra, que hace pensar a toda la humanidad, pero en especial a las potencias occidentales. En los últimos años, el proceso globalizador ha hecho que el poder de occidente se extienda por todo el mundo, imponiéndose en muchas ocasiones sobre otras tierras y culturas.
La globalización permite además que la economía, el comercio y el consumo se muevan a escala mundial. Tal y como comenté en un artículo anterior, llamado La Historia de las Cosas, se explotan brutalmente los recursos de la Tierra para destinarlos a la elaboración de productos con el menor coste posible. Muchos países con gran poder económico compran estas tierras sin que tenga mucha importancia lo que se va a hacer con ellas. ¿Qué más me da explotar un terreno en el que no vivo? Pensarán algunos. Para el pueblo sioux, la Tierra es un bien preciado, único y del que todos formamos parte. Sin embargo, y desafortunadamente, no todos piensan así. Para algunas personas, los recursos existen únicamente para ser explotados, utilizados, convertidos en beneficio y desechados sin importar cual sea el impacto que sufra el Planeta. ¿No es ésta una actuación contradictoria? Los habitantes del pueblo sioux no entienden por qué “el hombre blanco” destruye su propia casa, pero lo cierto es que yo tampoco. Y cuando digo casa, me refiero a una casa prestada, una casa que aunque ahora es nuestra, ha sido habitada por otras personas y a su vez, debe poder ofrecer cobijo a las generaciones futuras. Al igual que sacamos un libro de la biblioteca, éste es nuestro por un tiempo, pero después debe pasar a otros lectores. Es por eso, que ni lo rayo, ni lo rompo ni lo desencuaderno. ¿Y si lo hiciera?, todos sabemos que tendría un castigo inmediato. Es una pena que no ocurra esto mismo con el maltrato de la Tierra. El “castigo” no es tan inmediato y serán las generaciones futuras las que paguen nuestros errores. No obstante, el deshielo de los polos, las cada vez más frecuentes inundaciones y la destrucción de la capa de ozono son algunas de las señales que nos avisan de que esto va a ocurrir y parece que mucho antes de lo que esperábamos.  Nadie se libra del castigo pero,  aún así, estamos a tiempo de evitar que esto vaya a más y como siempre, podemos aportar nuestro granito de arena.

lunes, 2 de mayo de 2011

LA HISTORIA DE LAS COSAS



Cada vez quedan menos recursos en el Planeta, el aire que respiramos está contaminado por sustancias que nosotros mismos hemos enviado a la atmósfera, los animales de los cuales nos alimentamos ya no pueden vivir en sus hábitats naturales, porque hemos acabado con ellos. Muchas de las especies han desaparecido, y no ha sido por causas naturales. Los polos se derriten, el nivel del mar aumenta. ¿No nos parecen motivos suficientes para parar de una vez por todas? El proceso que conocemos como la economía de los materiales no está funcionando, y no está funcionando desde el principio. Desde el mismo momento en que el ser humano extrae los materiales, explota, destruye y tala, provocando desertización, desplazamientos de millones de personas, y lugares en los que literalmente no se puede vivir, estamos haciendo algo mal. Esto parece una razón más que de peso para intentar mejorar el sistema, pero lo cierto es que la cosa no queda ahí.

Extracción – Producción – Distribución – Consumo - Disposición

Si analizamos este proceso lineal a fondo, tal y como se ha hecho en este video, veremos que está incompleto, y presenta muchos límites, más razones para recapacitar.

Estamos destruyendo el Planeta, el lugar en el que vivimos, ¿a caso destruye uno su propia casa? ¿Por qué lo hacemos entonces con el Planeta? ¿No podemos entender que sólo tenemos uno? Un único lugar en el que vivimos todos. Para algunos, es preferible enriquecerse ahora a cualquier precio, sin importar las consecuencias. Deberíamos acabar con esto, y lo cierto es que, entre todos, se puede conseguir. Parece un proyecto utópico, casi inalcanzable, pues hay individuos como los que hemos nombrado antes, con gran poder económico, pendientes tan sólo de sus beneficios.
Pero, por otro lado, están el resto de personas que, aunque carecen de tales recursos, superan en número. Y a fin de cuentas, lo que importa son esos pequeños actos individuales, que forman el conjunto, aquellos de esas personas que luchan por que vivamos en un mundo mejor, no sólo para unos cuantos, sino para todos. Somos las marionetas de una sociedad consumista, nos manipulan para que compremos, utilicemos y desechemos, para que sigamos alimentando la flechita. Ha llegado el momento de decir basta, el cambio es posible y entre todos, podemos conseguirlo.