martes, 28 de diciembre de 2010

REFLEXIÓN PERSONAL DE LA CHARLA DE EUGENIO MOYA CANTERO ‘’FILOSOFÍA Y TECNOLOGÍA’’

El pasado martes 14 de diciembre contamos con la presencia de Eugenio Moya Cantero en nuestro instituto, Juan de la Cierva y Codorníu de Totana. Con motivo de la Semana Filosófica, que se realiza cada año, los alumnos de primero de Bachillerato pudimos recibir distintas charlas de profesores de la Universidad de Murcia. He elegido esta charla porque me gustó especialmente el tema del que trataba y cómo se realizó la exposición.

REFLEXIÓN

Miremos el mundo en el que vivimos. Las cosas de las que estamos rodeados. Encontraremos tecnología a donde quiera que vayamos. En mayor o en menor medida, eso es cierto, pero sería inútil negar que desde la Prehistoria hasta ahora no hayan mejorado nuestras condiciones de vida. Bien es cierto que la diferencia de calidad de vida entre los países tercermundistas y los desarrollados es descomunal. Sin embargo, tanto los habitantes de un lugar como los de otro tienen algo en común, un rasgo que les diferencia del resto de animales: la capacidad de imaginación. El ser humano es el único animal que puede imaginar, pensar en cosas que nunca antes habían existido y recrearlas en su mente. Es aquí cuando aparece la técnica: el medio que permite al ser humano hacer realidad los proyectos de su imaginación.

Normalmente, utilizamos la técnica para vivir mejor, para garantizar nuestro bienestar. Sin embargo, esto no es siempre así. La imaginación ocupa gran parte en nuestro mundo interior, que es íntimo, único y personal. Cada cual es libre de imaginar lo que quiera. El problema es, todo lo que imagino que se puede hacer, ¿se debe hacer? ¿Qué ocurriría si cada cual, a su imagen y semejanza decidiera crear todo lo que imagina sin un mínimo de razón? ¿Qué hay de todas esas personas que crean sofisticadas armas y compuestos químicos cuyo único fin es matar? ¿Nos proporciona eso mayor bienestar, una vida buena, plena y satisfactoria? Obviamente no, y es aquí donde entra en juego la filosofía, que se encarga de valorar los riesgos de estos mundos artificiales y la polémica de si deben llevarse a cabo o no.

Desde mi punto de vista, el papel de la filosofía en el mundo de la tecnología es fundamental. Es cierto que no siempre consigue evitar que las ideas inmorales, destructivas y perjudiciales para los seres vivos y el planeta se realicen, sin embargo, debemos seguir trabajando en la educación de la sociedad desde un punto de vista ético y moral. Afortunadamente la mayoría de los seres humanos poseemos un mínimo de ética a la hora de materializar nuestras ideas, pensamos en las repercusiones que tendrán sobre la sociedad y el mundo, y si sería correcto realizarlas o no. Hoy en día, no siempre es fácil tener en cuenta estos factores, pues la tecnología está en todas partes y el ser humano es cada vez más y más ambicioso. No obstante, jamás deberíamos olvidar que el bien común y el bienestar de las personas están por encima de esos proyectos personales, que muchas veces se centran en algo que solo beneficia a una minoría, que solo busca el beneficio económico, el motor del mundo actual.

viernes, 24 de diciembre de 2010

A.I. INTELIGENCIA ARTIFICIAL

ARGUMENTO

Nos encontramos en una época futura donde la tecnología está avanzando a un ritmo vertiginoso. En un mundo donde los avances científicos hacen posible la existencia, los humanos comparten todos los aspectos de sus vidas con sofisticados robots denominados Mecas. La emoción es la última y controvertida frontera en la evolución de las máquinas. Pero cuando un avanzado niño robótico llamado David es programado para amar, los humanos no están preparados para las consecuencias. David se encuentra solo en un extraño y peligroso mundo. Ayudado por un androide, David intenta averiguar el secreto de su propia identidad, descubriendo un mundo en el que la línea entre los humanos y los robots es aterradora y profundamente delgada.



REFLEXIÓN PERSONAL

Esta película nos hace reflexionar sobre la posible existencia de un mundo futuro en el que los robots convivan con sus creadores, los humanos. Pero no sólo eso, llega más allá. ¿Y si fuéramos capaces de crear vida artificial dotada de inteligencia propia, de sentimientos, de moral? Una cosa es clara, según el dualismo (El tema que trabajamos mis compañeras y yo en clase) estamos compuestos por dos sustancias, el cuerpo y el alma. Hasta ahora hemos sido capaces de crear un cuerpo material, pero la parte espiritual se nos resiste. ¿Seremos capaces en un futuro de crear un alma que complete a ese cuerpo? Según Descartes, el alma incluye a la razón y el pensamiento. ¿Habremos creado entonces seres humanos dotados de pensamiento propio que sólo se distinguirán de nosotros más que por su composición abiótica? Podemos encontrar la respuesta a estas preguntas en esta película, que de algún modo intenta recrear un mundo diferente del que conocemos, mostrándonos esta posibilidad del futuro. Mientras tanto, sólo nos queda observar los avances de la ciencia, que bien es cierto son asombrosos, sin embargo, yo me resisto a pensar que jamás será capaz de crear un alma, si así fuese este mundo sería demasiado previsible, el ser humano sería capaz de todo, si creara un alma sería porque la conoce, conoce su funcionamiento, sus secretos. ¿Conocerían entonces la completa composición de las personas? ¿No son nuestras almas diferentes? ¿Qué sería de las relaciones sociales en las que cada individuo se esfuerza por conocer al otro? Prefiero que la ciencia siga dejando esto a las personas y que nosotros sigamos teniendo el control sobre las máquinas, pues debemos ser conscientes, si les dotamos de un pensamiento como el nuestro, podrán sublevarse al igual que hacemos nosotros cuando no estamos de acuerdo con lo que nos rodea.

SIGMUND FREUD


Sigmund Freud nació en 1856 en Freiberg, antigua Moravia (actual Checoslovaquia) y falleció en 1939, en Londres, Inglaterra. Nació en el seno de una familia judía, que se trasladaría posteriormente a Viena. En 1938, se vio obligado (dada su condición de judío sus obras habían sido quemadas en Berlín en 1933) a emprender el camino del exilio hacia Londres como consecuencia de la anexión de Austria al proyecto pangermanista de la Gran Alemania, preparada por los nazis. Estos hechos influyeron de lleno en su concepción pesimista del hombre y del futuro de la sociedad, que reflejaría más tarde en sus obras. Sin embargo, Freud es conocido mundialmente por la creación del psicoanálisis.

EL PSQUISMO HUMANO


Según Freud, la consciencia es la punta del iceberg de nuestra personalidad. La parte que sale al exterior y sobre la que tenemos control. Por debajo de ella está el inconsciente, formado por el ELLO (impulsos irracionales: vitales y eróticos por un lado, y agresivos y destructivos por otro) y por el SUPERYÓ (la censura moral y el ideal que tenemos de nosotros mismos). Atrapado entre estas fuerzas, el YO lucha por mantener el equilibrio sin vulnerar las normas de la vida en sociedad. El principio de la realidad exige ciertas renuncias al principio del placer, pero también algunas concesiones.





Aquí os dejo algunas de las frases de Freud que más me han gustado:

- “Cada uno de nosotros tiene a todos como mortales menos a sí mismo”.


- “El primer humano que insultó a su enemigo en vez de tirarle una piedra fue el fundador de la civilización”.


- “He sido un hombre afortunado; en la vida nada me ha sido fácil”.


- “La humanidad progresa. Hoy solamente quema mis libros; siglos atrás me hubieran quemado a mí”.


- “Si dos individuos están siempre de acuerdo en todo, puedo asegurar que uno de los dos piensa por ambos”.


- “Uno es dueño de lo que calla y esclavo de lo que habla”.


- “La más clara prueba de que existe vida inteligente en otros planetas, es que todavía no han venido a visitarnos”.

Sigmund Freud.


EL DERECHO AL DELIRIO

Hola a todos, antes de comenzar con las entradas del blog me gustaría dar la bienvenida a todo el mundo con un video que me pasó una amiga que lucha día a día por mejorar nuestro planeta. Me pareció precioso. Respecto al tema del ser humano, creo que este video nos hace darnos cuenta de la sociedad en la que vivimos, de cómo podría ser un mundo perfecto, en el que todos los humanos tuviéramos los mismos derechos. Al menos habrá uno que todos tendremos siempre y que nadie nos podrá quitar, el derecho a soñar.